Alfombra Roja, Continua!!!!

Chicas, este One shot, lo publique el 15 de Mayo pasado y desperto tal respuesta que me llevo hacer una encuesta que arrojo que un 87% queria ver como seguia, me decidi y le di el vamos a esta historia, ojala pueda publicar mañana su continación, aqui les dejo el original para ver si se animan a seguir la historia...

Besos mi Bandita Crepusculera!!!
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La Alfombra Roja

“Un gran despliegue de personas en la alfombra roja esta noche, todos los artistas más importantes ya han desfilado el día de hoy, aunque la mayoría espera con ansiedad la llegada de Robert Pattison, un centenar de periodistas y miles y miles de fans que están aquí desde hace por lo menos 3 días, solo para verlo un segundo tan solo”

-¿Que locura estoy viviendo?, ¡pero qué emoción también!, el sueño de llegar hasta acá se cumplió, lo que soñamos hace un año, ahora era real, aunque mi amiga Alexa hace horas que se me había perdido, yo estaba frente a la alfombra ahora, a la espera de su llegada, a la espera de morir fulminada de un ataque al corazón, los tres días durmiendo a la intemperie habían valido, seguro que sí!, ¿donde estaría Alexa?

De repente comenzó el publico a rugir, era una locura, ya no se podía oír nada, ni a la persona que estaba a tu lado y vaya que estábamos pegados, era un signo que “él” se acercaba, no sé porque pero empecé a sentirme mareada, unas ganas terribles de ir al baño, comencé a transpirar como una loca, estaba claramente hiperventilando.

-Tranquila!, ¡tranquila!- me obligaba en voz baja, mientras intentaba pensar en una situación de calma, cerré los ojos tratando de aislar el momento mientras el bullicio aumentaba y aumentaba.

-Coka, recuerda todo el esfuerzo, todo lo que te costo ahorrar para esto, tranquila!!!- me gritaba a mi misma, mientras el tipo al lado ya me miraba un poco asustado.

-Alexa, ¡¿donde mierda estas?!- decía mientras la llamaba por el celular que sabía que no conectaría porque la señal estaba saturadísima, estaba al borde de las lagrimas, de emoción, de rabia por no poder controlarme, y sobre todo porque no estaría allí Alexa para compartirlo y luego recordar cada detalle por tonto que fuera.

El bullicio ya era insoportable, y en ese momento lo vi… era él, apenas podían moverse no lo dejaban avanzar, daba un paso y retrocedía 2, sonreí pero se veía un poco incomodo, como lo conocía tan bien y lo había estudiado más que cualquier materia de la universidad, sabía que la situación le era tremendamente incomoda, y la palabra correcta era “sufría” con toda esta sobre-exposición. Desde el lugar privilegiado en que me encontraba con los 4 libros a cuestas de la saga, podía verle y en lo único que pensaba es en que le llamara la atención que hubiese una loca con los 4 libros a cuestas, triste, pero fue lo único que se me ocurrió para sobresalir.

El avanzaba hacia donde yo me encontraba y a mí las piernas comenzaban a fallarme, no podía creer que en minutos estaría frente a mi “él”, él hombre de mis sueños, al mirarlo así de soslayo era extraño pero parecía un chico cualquiera, bello pero ahora ahí tan cerca me parecía más humano, quizá si tuviese la oportunidad de conocerlo por un periodo más largo, podría sentirlo hasta como alguien familiar, sería tan increíble poder saludarlo por las mañanas con un beso y preguntarle simplemente “¿como estas?”

-¿Como estas?- Decía en voz alta mientras soñaba.

-Bien ¿y tu como estas?-dijo un amable Robert mientras tomaba uno de mis libros y lo firmaba, yo estaba paralizada.

No podía respirar ni moverme, mientras el firmaba mi libro, el tiempo se detuvo, era verdad lo que decían sobre el amor, “cuando conoces al amor de tu vida, el tiempo se detiene”, justo eso me paso.

-Aquí tienes chica-¡chica!, ¡oye!- ¿que le pasa a esta chica?-preguntaba un confundido Robert.

Yo lo miraba extasiada, encantada y de pronto el flash de una cámara me trajo de vuelta, lo mire por primera vez cuerdamente y sin pensarlo hice lo único que se me ocurrió ya que no habría más oportunidad de verle en la vida en esta situación, lo tome de ambas orejas y lo atraje a mi boca, es una locura y cuando lo recuerdo aun no puedo creerlo, lo bese por largos 4 segundos, mientras mil flash nos caían encima, luego lo solté, tome el libro que aun estaba en su mano y me perdí entre la multitud, Robert permanecía allí de pie, el petrificado era él ahora.

“Estamos transmitiendo desde la alfombra roja y algo extraordinariamente loco ha ocurrido recién, una fans presa seguramente de la adrenalina del momento le ha robado un beso no menor al hombre más bello según la revista People, si señores Robert Pattison ha sido atacado en plena alfombra roja, seguramente mañana los tabloides no hablaran de otra cosa, y la reciente desconocida estará en todas las portadas del mundo, es lo que tiene la fama llega sin esperarla”

Alexa como es de esperar aun no me ha perdonado que haya hecho eso sin que estuviera presente y de esto ya ha pasado más de un mes, consiguieron saber quien era, llamaron a todos mis amigos y enemigos, hasta se pusieron en contacto con mis profesores, eso sí fue vergonzoso, han intentado contactarme de 587 medios de todo el planeta hasta oprah ha querido entrevistarme y me he negado, no porque no quiera si no porque me moriría de vergüenza si mi padre me ve en la televisión solo para contar una y otra vez que bese a un total desconocido para él, bastante suerte tuve con que no me tomaran detenida y salir sin problema de EEUU.

El teléfono nuevamente sonó, mi madre que estaba hasta las masas de contestar el teléfono y decir una y otra vez que yo no me pondría, simplemente había dimitido y el maldito teléfono me volvía loca sonando una y otra vez, decidí contestar antes que ella me echara de la casa.

-Hola buenos días, le llamamos de New York, no corte le van a hablar- dijo una voz marcadamente latina.

-Hola Coka, ¡por fin nos podemos conocer!-dijo una voz grave al otro lado del teléfono.

-¿Quien habla?, porque la verdad no voy a hablar con nadie sobre lo de Robert Pattison, por lo que le pediría que no volviera a llamar- dije llena de cólera, él no tenía la culpa pero lamentablemente era la copa que rebalsaba el vaso

-Bueno chica, yo creo que no debieras ser tan maleducada y conocer a las personas antes de besarlas ¿o no?- Dijo mientras reía.

-Mire yo no tengo ganas de que me hagan juicios de valor, menos un desconocido, que me llama a “mi casa”, si yo no le he dado el numero- dije ahora de verdad molesta .

-Es que no sería un desconocido si te hubieses presentado en lugar de salir huyendo cuando me besaste- ahora su voz era totalmente amable.

-Solté el auricular y me desmaye