“¡Bella amor… por favor!” grité en mi mente, quería que me mirara de nuevo, que sus enormes ojos chocolate se fijaran en mí… quería que tocara mi fría piel con su extrema calidez y sabía ¡maldita sea!... sabía que eso no ocurriría otra vez, no la tendría conmigo de nuevo de esa manera… pero la tendría, aún más hermosa, más irrompible, más perpetua y conmigo… siempre a mi lado y era lo único que me incitaba a seguir moviéndome frenéticamente arriba de ella, estrujando su corazón y obligándolo a tomar vida de donde no había.
Mi Bella había decidido volar y lo único que me mantenía a su lado, colgado de sus alas era creer férreamente que ella regresaría si yo insistía, debía traerla de vuelta, no solo por mí porque claro, sin ella yo no era más que un despojo de criatura viviente, sino también por mi niña… por mi Renesmee.
“¡Maldición!... reacciona amor” pensé obstinado y perdiendo la cuenta de los movimientos de mis manos
1 comentario:
LU!!
me como las uñas por saber que pasa con Edward....
Quiero que sea miercoles YA!!!
Besos
te quiero millones
Amo esta historia
Publicar un comentario